Jos Manuel, Martnez (OCEI) 644b20
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La industrializacin ha sido por mucho tiempo considerada como factor clave para obtener el desarrollo econmico y ste se ha tomado como equivalente de desarrollo social. Nos acostumbramos y lo aceptamos casi como cosa natural.
En los medios internacionales persiste la tendencia a medir el grado de desarrollo de los pases por medio de indicado res global es tales como: ingreso per cpita, equilibrio de la balanza comercial, producto interior bruto, etc. en vez de referirse a parmetros de verdadero contenido social, como pueden ser expectativa de vida, morbilidad, nivel educativo, produccin cientfica, cultural y artstica, grado de distribucin de la riqueza, los bienes y los servicios, etc.
Esa simplificacin sigue ocurriendo a pesar de que es bien sabido la dificultad que hay para reunir en pocos parmetros, tan globales, toda la multitud de variables que permitan expresar las mltiples dimensiones del “Desarrollo” de una sociedad. Al referirse solamente a los aspectos econmicos y especialmente a la industrializacin se pierde de vista la capacidad de un pas o de una sociedad para satisfacer sus necesidades y para impulsar la realizacin de las potencialidades individuales de creacin, expresin, comunicacin y convivencia, en otras palabras: “su grado de felicidad”.
Esa sinonimia establecida entre industrializacin y desarrollo ha conducido a que los pases que no tienen todava capacidad para satisfacer oportunamente las demandas de su poblacin hayan tratado, por todos los medios, de dotarse de una capacidad propia de produccin de bienes y servicios y, aunque no se puede negar que la industrializacin realizada ha permitido un aprendizaje y una elevacin general del nivel de vida, tambin es cierto, desgraciadamente, que han aumentado en forma sorprendente la dependencia econmica y tecnolgica de los pases ms avanzados y persisten y se ahondan las desigualdades internas para el disfrute de los beneficios y riquezas del pas.
Dos conclusiones importantes deben sacarse del escueto anlisis anterior: a) la conveniencia de definir el nivel de desarrollo en trminos ms humanos y sociales.
b) la necesidad de reinterpretar el papel de la industrializacin para la generacin y distribucin de mayores beneficios sociales.
Discutamos ms a fondo la segunda cuestin. Ultimadamente, de todas maneras, bajo cualquier sistema social interesado en elevar y extender el nivel de vida y disfrute de los productos generados socialmente, la produccin industrial es una piedra angular para garantizar este objetivo.
Ms de veinticinco aos de industrializacin por sustitucin de importaciones han dejado sentir claramente que la instalacin de facilidades productivas no basta. El ahorro que se produce de la importacin de bienes terminados no llega a compensar frecuentemente la elevacin de costos de las materias primas, de las maquinarias, de la tecnologa, ni conducen necesariamente a etapas de mayor autonoma.
En un principio se percibi que la clave estaba en desarrollar una capacidad cientfica nacional, a fin de que ella permitiera producir tecnologas propias en respaldo de la industria nacional, pero ya hace mucho tiempo que se constat, tambin, que ese modelo unidimensional no funciona en la realidad y que las interrelaciones entre esos factores son muchos ms complejas.
Hoy da, en Venezuela, se busca afanosamente apoyar el desarrollo de una capacidad tecnolgica propia, capaz de producir productos con diseo propio, sin comprar tecnologas extranjeras, y capaz de dar solucin localmente a muchos de los problemas que surgen en la produccin o en la utilizacin de los productos de la tcnica. Los grupos de vanguardia estimulan y tratan de proteger la creacin de empresas con tecnologa propia, la orientacin de los centros de investigacin hacia el desarrollo tecnolgico, la ciencia aplicada y la canalizacin de la demanda tecnolgica del Estado hacia la oferta tecnolgica nacional.
El enfoque mayormente tcnico que rodea a estas iniciativas permite avizorar el peligro de que se caiga nuevamente en modelos limitados, incompletos, que ahoguen el actual entusiasmo, anulen las posibilidades de progreso y causen nuevas decepciones y fracasos.
Ha sido muy importante haberse dado cuenta de que se puede ser productor industrial y al mismo tiempo consumidor de tecnologa y que con ello la dependencia puede ser an mayor, pero hay tambin que reconocer que tener capacidad para producir tecnologa no resuelve el problema de fondo, tal como ocurri cuando se intent organizar la capacidad de produccin cientfica y eso no produjo cambios en el nivel de desarrollo industrial o de la sociedad. La produccin de tecnologa, entendida en una primera instancia como capacidad de diseo, conduce ms inmediatamente al desarrollo de una capacidad industrial propia y al avance de un proceso de aprendizaje tcnico ms integral, como veremos ms adelante, pero tampoco garantiza por si sola una verdadera elevacin del nivel de desarrollo del pas, a menos que est ntimamente imbricada con el funcionamiento y con las relaciones de los diversos sectores econmicos y grupos sociales que componen la sociedad.
La diferencia est en entender al desarrollo tecnolgico tan solo como un conjunto de actividades tcnicas o incorporar a su alrededor e interior numerosas variables de ndole social y poltica.
Dominio tecnolgico no significa contar tan slo con los conocimientos tcnicos necesarios para usar equipos y procesos de la ltima tecnologa, hay que saber producirlos, disearlos y crear nuevos conocimientos. Significa tambin tener la capacidad econmica y organizativa necesaria para hacer que ellos estn adaptados a las necesidades de nuestra sociedad y a la disponibilidad de nuestros propios recursos y poder llevarlos al mercado nacional e internacional en condiciones atractivas para los clientes. Significa, igualmente, tener la capacidad organizativa y poltica para crear todo el conjunto necesario de instituciones que le den permanencia y organizacin a la realizacin de todas las actividades necesarias para crear, producir, difundir, utilizar la tecnologa, sus productos, sus conocimientos. Requiere, por ltimo, lograr que la tecnologa se convierta en un componente ms de nuestra propia cultura, que la poblacin venezolana la sepa utilizar, producir, crear, que la aprecie como algo suyo. Slo as podr ponerla al servicio de sus necesidades de desarrollo.
Organizar las energas del pas para enfrentar exitosamente este reto es labor que no puede hacerse sin el consenso de muchos grupos y voluntades. El dominio tecnolgico hay que entenderlo, por lo tanto, como proceso social complejo. Conseguir un cierto nivel de dominio tecnolgico en alguna o algunas ramas no es asunto que lleve poco tiempo, como no ha sido tampoco as en los pases industrializados; ni ser un camino suave, una vez se tenga conciencia de su importancia; ms an que la industrializacin ser un proceso pleno de confrontaciones sociales y polticas, a nivel nacional e internacional. Tratemos de profundizar en los elementos que componen el dominio tecnolgico para poder entender mejor las posibilidades y dificultades.